No debiera ser así, pero en España parece que es un problema la convivencia entre las distintas Lenguas que la habitan. Y este problema se evidencia más en lo referente al Sistema Educativo. Como me parece un tema interesante, me gustaría entretenerme con algunos de sus aspectos (sólo algunos):
– En primer lugar, hay que desterrar la idea -me temo que generalizada- de que España es una rareza al convivir dentro del Estado varias lenguas. Y sin embargo, no es así: en Italia, por ejemplo, coexisten unas 8 lenguas legalmente reconocidas (sardo, lombardo, véneto, napolitano, siciliano, friuliano y romanche además del italiano propiamente dicho); basta leer al estupendo Andrea Camilleri para darse cuenta de que estos idiomas no son fósiles ni mucho menos. En Francia se hablan bretón, occitano, alsaciano, corso y vasco además del francés. En Alemania conviven unas seis variedades de alemán además de algún idioma eslavo, etc., etc.
Que yo sepa, en ninguno de esos países el idioma es un problema que distraiga las mentes de los gobernantes y les impida dedicarse a temas más sustanciales. Y en ninguno de ellos, cuando decimos alemán o francés o italiano, tenemos dudas de a qué nos estamos refiriendo. Por cierto: los supremacistas de la Lombardía no han usado la lengua como arma política (para cualquier italiano eso habría sido ridículo); allí se les ha visto como lo que son: extremistas de derechas que buscan prebendas.
– Otro aspecto importante es que la neurociencia del lenguaje ha demostrado que el idioma materno influye en la forma en que trabaja y procesa el cerebro humano. Parece ser que la estructura de cada lengua, su peculiar forma de organizar los sintagmas y otros aspectos lingüísticos característicos de cada una influyen en cómo se desarrolla y organiza el cerebro y en cómo estructura las redes neuronales utilizadas en el procesamiento del lenguaje. A fin de cuentas, “pensamos” palabras; nuestras ideas “están hechas” de palabras.
Por todo ello, parece evidente que cuando a alguien se le violenta en el uso de su lengua materna se le está violentando en algo muy profundo.
– Nos vamos acercando a los aspectos políticos de la cuestión. Escolarizar a un alumno desde su primera infancia en una lengua distinta a la suya materna constituirá un hándicap para su rendimiento académico. Si desde niño le ocurre eso, es muy probable que arrastre unas trabas que dificultarán el desarrollo de todos sus potenciales. Opino que desde una perspectiva de izquierda hay que combatir esa discriminación y evitar que segregue a las capas sociales menos favorecidas puesto que son éstas quienes tienen más difícil compensar esas barreras (aunque es posible que a algunos miembros de la alta burguesía catalanista eso no les importe demasiado).
– Por tanto, desde una perspectiva de izquierda creo que habría que defender estos dos postulados:
- debe ser libre el uso de la lengua materna en las esferas privadas.
- en las Comunidades bilingües, dentro de las Etapas Obligatorias, debe ser libre la elección de la lengua vehicular en la enseñanza (que se complementará con el estudio de la otra lengua cooficial como segunda lengua).
– Pero, además, el lenguaje tiene otro uso importante: la Lengua es también una herramienta que sirve para comunicarnos. En este aspecto, la Lengua es un instrumento en el que prima la utilidad (repito: en este aspecto).
Por eso, para dirigirse a la Administración y para comunicarse en espacios comunes (sobre todo en los oficiales) es lógico usar una herramienta que facilite la comunicación: la Lengua común. Lo demás son ganas de marear la perdiz; o peor aún: ganas de eliminar todo lo que nos une y de potenciar todo lo que nos separa.
– Finalmente, una máxima a no olvidar: “Las Lenguas no son sujeto de derechos; los que tienen derechos son los hablantes” y desde la verdadera izquierda hay que defender los derechos de esas personas.
– Me gustaría también provocar la reflexión acerca de cómo las lenguas parecen desempeñar hoy en la mente de los secesionistas el mismo papel que en su día (s. XVII) desempeñaron las religiones. Pero eso, para otro artículo tal vez.
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buen articulo y muy cierto, en Europa hay casi 200 idiomas y no por esto hay 200 naciones, la ideologia del separatismo que una lengua equivale a una nacion es un invento de burguesias regionales ricas que quieren ser mas ricas